Para los masones latinoamericanos, la figura de Aldo Lavagnini es emblemática.
Bajo el seudónimo de Magister, escribió una serie de manuales a través de los cuales varias generaciones de iniciados se han
introducido en los misterios de la francmasonería. Su obra es, probablemente, la más difundida literatura masónica en habla hispana. Pero
muy poco se sabe de la vida de Lavagnini. En los últimos meses Editorial Kier
ha lanzado una nueva edición de sus obras. La serie correspondiente a los
grados simbólicos ya se está distribuyendo, y no pasará mucho tiempo para que
se complete la serie correspondiente a los Altos Grados. La novedad -además de una nueva diagramación y un bello diseño de tapa- es que en
el Manual del Maestro se ha introducido un prólogo del escritor Phileas del Montesexto
que contiene una gran cantidad de información biográfica sobre el autor.
Este prefacio resulta imprescindible si se quiere comprender el contexto en el que la obra fue escrita. Pero además, las complejas circunstancias históricas por las que debió atravesar el autor, otorgan al texto una nueva perspectiva que es desconocida por la mayor parte de sus lectores.
Nacido en Italia en
1896, Lavagnini fue uno de los referentes de esoterismo italiano en tiempos del ascenso
del fascismo. Médico de profesión, se destacó como un prolífico escritor que
incursionó en varias materias, entre ellas la astrología, el estudio de las
sociedades secretas y la simbología masónica. Fue perseguido, al igual que
muchos masones contemporáneos, por el régimen de Benito Mussolini, luego de que
el Duce disolviera a la masonería italiana. En efecto, una vez
consolidado en el poder, el gobierno fascista procedió a desmantelar no solo
las logias sino también a las organizaciones que respondían al Gran Oriente de
Italia. Mediante un decreto se obligó a los miembros del partido fascista a que
se definieran por una u otra institución, lo que produjo la inmediata dimisión
del general Cappello, fascista prominente, que se negó a abandonar la Orden. Al
año siguiente sería acusado de atentar contra Mussollini y condenado a treinta
años de prisión. La disolución de la masonería italiana provocó el exilio
de miles de masones, con su Gran Maestre a la cabeza, Dominizio Torrigiani,
refugiado en la isla de Lipari, en donde moriría poco después.
Siguiendo la misma
suerte de sus Hermanos, a mediados de la década del 1930 Lavagnini se exilió en
México en donde comenzó su tarea de difundir los principios de la
francmasonería.
Sin embargo, su obra
cobró dimensión universal a partir de la década de 1940, cuando Editorial Kier
comenzó a publicar los Manuales de su colección “La Masonería Revelada”.
Se pregunta con acierto Phileas de Montesexto en el mencionado Prólogo: ¿Por qué molesta tanto Lavagnini a las corrientes materialistas de la Masonería? ¿Por qué algunos se niegan a aceptarlo como Hermano? Sin duda, a los francmasones ateos les fastidia que Lavagnini incorpore elementos espirituales a sus obras pero más les molesta que sus libros sigan siendo tan populares, aún en el interior de las propias filas masónicas. Al no ser tampoco un exponente claro de las doctrinas tradicionales y estar demasiado cerca de algunas corrientes espiritualistas condenadas por René Guénon, Lavagnini también suele ser menospreciado muchas veces por algunos masones que se identifican con el perennialismo. Es verdad, la obra de Lavagnini tal vez no sea perfecta, pero si tenemos en cuenta el complicado entorno en donde fue producida y el público al que fue dirigida, tendremos que aceptar que la colección masónica de Magister posee un valor innegable.
Phileas del Montesexto tiene el mérito de haber sorteado las dificultades con las que se encuentra el investigador a la hora de encontrar fuentes confiables sobre la vida de Lavagnini, logrando una importante cantidad de información casi desconocida para los masones. Por todas las razones expuestas, creo que se trata de una obra invalorable que no solo retrata una etapa fundamental de la francmasonería sino que contiene todos los elementos necesarios para el análisis profundo de los símbolos y las alegorías en los que abreva una importante corriente masónica.
Eduardo Callaey
Eduardo Callaey
VH Eduardo, agradecería me pudieras decir, si los libros se venderán en Panamá en algún momento. En nuestro Or.*. utilizamos mucho; como dices, estos libros. Te extiendo un TAF.*. y mis mejores deseos de Paz Profunda, David
ResponderEliminarQue precio tiene por los 3 tomos
ResponderEliminarV:.h:..como puedo conseguir los libros aqui en usa? Gracias t:.a:.f.
ResponderEliminarComo comprar en Peru
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